La Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América-Tratado de Comercio de los Pueblos, Alba-TCP, rechazó enérgicamente el golpe de Estado parlamentario contra la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff.
Mediante un comunicado, la coalición internacional advierte que sectores oligárquicos, con el respaldo de intereses imperialistas, de las transnacionales y de grupos mediáticos, pretenden reinstaurar el neoliberalismo en Brasil y en otros países de nuestra región.
“Los países del Alba-TCP expresamos nuestra más firme solidaridad a la presidenta Dilma Rousseff y al líder del Partido de los Trabajadores Luiz Inacio Lula Da Silva, también sometido al acoso de la derecha, y reiteramos nuestro apoyo al valiente pueblo brasileño, que ha salido a las calles a rechazar esta abominable acción”, refiere el documento oficial.
A continuación, el comunicado íntegro:
Los países de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América-Tratado de Comercio de los Pueblos, ALBA-TCP, informados de la votación ocurrida en el día de ayer en el Senado de Brasil, rechazamos enérgicamente el golpe de Estado parlamentario-judicial que está camino de consumarse en ese país.
El juicio político contra la presidenta legítima Dilma Rousseff es una maniobra, disfrazada de legalidad, para apartarla de su cargo y desacreditarla a ella y al Partido de los Trabajadores (PT), sin que existan razones legítimas ni fundamentos jurídicos para ello.
Sectores oligárquicos, con el respaldo de intereses imperialistas, de las transnacionales y de grupos mediáticos, pretenden reinstaurar el neoliberalismo en Brasil y en otros países de nuestra región, alinear la política exterior brasileña con los intereses imperiales y desmantelar los programas sociales de los gobiernos del PT, que han beneficiado ampliamente a millones de ciudadanos brasileños, como nunca antes en la historia de esa hermana nación, en áreas como la alimentación, la salud, la vivienda y la educación.
Este atentado contra la voluntad popular de millones de brasileños expresada en las urnas, es una nueva expresión de la contraofensiva reaccionaria dirigida a derrocar a los gobiernos que han favorecido a los más necesitados y si se consuma definitivamente, amenazaría la democracia, la paz y la estabilidad en Brasil y en nuestra región, y con ello la vigencia de la Proclama de América Latina y el Caribe como Zona de Paz, adoptada por los Jefes de Estado y de Gobierno en la II Cumbre de la CELAC, en La Habana, en el año 2014.
Los países del ALBA-TCP expresamos nuestra más firme solidaridad a la presidenta Dilma Rousseff y al líder del Partido de los Trabajadores Luiz Inacio Lula Da Silva, también sometido al acoso de la derecha, y reiteramos nuestro apoyo al valiente pueblo brasileño, que ha salido a las calles a rechazar esta abominable acción.